SENTIMIENTO SANGRANTE

Cuando se ama o simplemente se quiere, esa palabra que se llama AMOR, rebota como una pelota de goma por todo el cuerpo y se vuelve parte indispensable de nuestras vidas, porque nos da felicidad, ánimos… dibuja una sonrisa en nuestra cara con lápices que se llaman esperanza, ternura, confianza... Es lindo cuando se tiene a alguien con un lienzo preparado para ti, un lienzo en el que trazarás con esos lápices todo tu camino, tu felicidad, tu meta. Platónicamente imaginamos que todavía hay una gota de amor lista para calmar tu desmesurada sed, en el desierto de falsedad, mentiras y desamor en el que a diario vivimos... Y sentimos las ansias de compartir un sentimiento vivo con aquella persona ideal para cada uno de nosotros que nos invade una emoción inquieta, un desesperado intento por sonreírle a la vida, y lo hacemos, porque esa persona ayuda al corazón a latir. Ayuda a nuestros pies a correr hacia la meta sin parar, sin mirar al pasado, solo hacia un puñado de pétalos de rosa llamado futuro... Pensando en la fuerza tan extrema que posee el amor para sacarte de los problemas, para brindarte soluciones certeras para tu vida, haciéndote sentir que la vida no acaba allí, que hay muchísimo camino por recorrer y que todavía estás siendo fuerte y te levantas para seguir... 
Yo solo voy a decirte que quisiera tenerte en frente para que me mires a los ojos y sepas que esto es para ti... pero no importa... La vida ya es una oportunidad... El resto se da solo... Sé que te sientes mal cuando me fallas, cuando sientes que conmigo no eres responsable, pero no importa, sólo lo que quiero es que estés bien. No me lo perdonaría si alguna vez fallas en algo crucial e importante para tu vida por mí. El tiempo es la vida, y si hay vida hay tiempo... No desesperes si me fallas, tienes tiempo para no fallar... Y para darte cuenta de que somos seres humanos, más no máquinas de perfección. Te quiero, te adoro, no te cambiaré por nadie, no buscaré a nadie más, te seguiré queriendo hasta que Dios y la vida me den la oportunidad de amarte. No te preocupes, mañana amanecerá y el sol iluminará tu cara... Juntos podemos. Estoy seguro de ello... Ahora si, esta carta es para ti... Mi sentimiento sangro, me corte el corazón con el filo de tu alma.